Esta oración la podemos hacer cuando estemos pasando momentos difíciles. Es una oración para los casos desesperados y podemos pedir para nosotros o para cualquier ser querido que tengamos.
Oración
¡Glorioso San Juan de la Cruz,
verdadero modelo de inocencia y penitencia!
yo os felicito por la victoria que alcanzasteis
sobre vuestros enemigos
y por la gloria, grandeza y poder de que gozáis…
Reformador de la Orden Carmelitana,
reformad mi alma, llena de miserias,
haciendo que conozca lo perecedero de este mundo,
para despreciarlo,
y lo sólido y constante de la virtud,
para amarla.
Consejero intimo de Santa Teresa de Jesús,
inducid mi espíritu a que constantemente busque
y alegremente abrace la perfección cristiana,
para que, si un día, preguntado por Dios,
que es lo que quiero por mis trabajos,
pueda responder, como vos respondisteis:
Señor, padecer y ser despreciado por vos.
Glorioso san Juan de la Cruz ten compasión de mí
e intercede, te lo ruego, ante tu amada
la Sacratísima Virgen María
para que tenga a bien auxiliarme
en esta gran tribulación que me desespera
y que oprime dolorosamente mi corazón:
(hacer la petición).
Dile que no me abandone,
que me conceda lo que con fervor solicito,
y que me bendiga en todo momento
con su misericordiosa protección,
alcanzadme este santo deseo
y la gracia de saberos imitar en la tierra,
para después poderos acompañar en el cielo.
Amén.
Rezar el Padrenuestro, Avemaría y Gloria.