La artrosis es una enfermedad que se genera cuando los cartílagos de las articulaciones empiezan a deteriorarse, produciendo fuertes dolores que, en ocasiones, causan la pérdida del movimiento del paciente.
Esta enfermedad disminuye seriamente la calidad de vida de las personas que la padecen, por lo tanto, es de vital importancia tomar acciones de manera inmediata ante su aparición. Hasta el momento no tiene cura, sin embargo, con un tratamiento adecuado las personas pueden aliviar sus síntomas y llevar una vida normal.
La artrosis es la enfermedad reumática más frecuente. Afecta a personas con edades superiores a los 55 años. Afortunadamente, no siempre es lo suficientemente severa como para inmovilizarlas.
Está directamente relacionada con el deterioro biológico, pero puede presentarse en edades tempranas debido a la práctica de malos hábitos.
Síntomas de la enfermedad
La artrosis puede aparecer en cualquier articulación, pero generalmente afecta a los dedos de las manos, al dedo gordo del pie, a pulgares, rodillas, cadera, lumbares y a las cervicales. También puede darse en hombros, codos o muñecas.
Se caracteriza por la inflamación de las articulaciones y la presencia de dolores, rigidez en las partes afectadas y hormigueo constante. En casos muy graves, genera dificultades en la habilidad de movimiento.
Para aliviarla es importante asistir a un especialista que diagnostique el trastorno y establezca un tratamiento adecuado, pero también debes saber que la ingesta de algunos alimentos también ayuda a mejorar las condiciones del paciente.
Si padeces artrosis echa un ojo a estas sugerencias de alimentación, podrían serte de gran ayuda.
Alimentos para aliviar la inflamación
Espinacas
Las espinacas contienen antioxidantes que neutralizan las acciones negativas de los radicales libres en las articulaciones.
También alivian las inflamaciones de los tejidos y aportan calcio y ácido fólico para el fortalecimiento de los huesos y cartílagos.
Zanahoria
La zanahoria contiene carotenos que protegen el cartílago articular, reduciendo de esta manera el riesgo de deterioro prematuro. Por otro lado, contiene minerales que contribuye a regenerar el tejido óseo y a controlar el dolor y la inflamación.
El consumo de zanahoria también fortalece el sistema inmunitario y protege al organismo contra infecciones que agravan esta condición.
Semillas de linaza
Las semillas de linaza contienen ácidos grasos omega 3 que ayudan a controlar la inflamación de los tejidos. Su ingesta como complemento dietético alivia el dolor y fortalece los cartílagos deteniendo el avance de la enfermedad.
Si al consumo de estas semillas se le agrega vitamina E, se refuerza el sistema con antioxidantes y nutrientes que ayudan a controlar el daño de los radicales libres en las células.
Pescado azul
El pescado azul cuenta con agentes antiinflamatorios que benefician notablemente las articulaciones. Además de ser una fuente de proteínas que, al ser absorbidas, ayudan a proteger los cartílagos evitando así el continuo deterioro de éstos.
Otra característica de este tipo de pescado es que contiene ácidos grasos omega 3 que promueven la desinflamación de los tejidos y crean una barrera protectora contra los radicales libres que atacan a las células.
Frutos cítricos
Los frutos cítricos contienen vitamina C y altas dosis de antioxidantes y antiinflamatorios, excelentes para combatir la artrosis además de para ayudar a la formación de colágeno y proteoglicanos, componentes que protegen los cartílagos y articulaciones.
Melón
Esta fruta posee propiedades diuréticas beneficiosas para evitar la retención de líquidos que empeora la inflamación de los tejidos. Además, contiene beta-carotenos y antioxidantes que frenan la progresión de la artrosis.
Aunque estos alimentos no curan la artrosis, son de gran ayuda para desacelerar su progreso y para mejorar la calidad de vida de las personas que la padecen.