Existen muchos tipos de champiñones y estamos acostumbrados a utilizarlos en nuestra rutina culinaria. El más conocido es el champiñón de París, esta seta recibe este nombre porque comienza a cultivarse en París en el siglo XVIII.
Tenemos champiñones cultivados artificialmente en lugares especiales y los champiñones silvestres que crecen de forma natural en bosques y campos. Si queremos cosechar champiñones por nuestra cuenta debemos saber identificar las setas no comestibles para evitar caer ante las intoxicaciones que pueden generarnos.
Se cree que los mejores champiñones son los de color más blanco, pero esto puede indicar que se hayan cosechado antes de su maduración total por lo que nos perderemos algunos nutrientes. Los mejores son los de color marrón claro o rosado pálido, sin grietas ni manchas y de buena consistencia.
Lo ideal es comerlos frescos pero también podremos conservarlos en la nevera unos 4 días si los cubrimos con un paño húmedo en el cajón de las verduras, esto principalmente porque las setas suelen absorber los olores de los alimentos que los rodeen.
Beneficios de los champiñones
Más del 90% del champiñón está conformado por agua, y aportan muy poca cantidad de hidrato de carbono y de grasas. Esto hace de las setas un alimento muy liviano y ligero. Es por esto que los champiñones son muy utilizados en dietas para rebatir la obesidad y para bajar de peso.
Un tiempo se los ha considerado un alimento poco nutritivo, pero la realidad es que las setas aportan muchas vitaminas y minerales. Su alto contenido de potasio combate el sodio que puede acumularse en nuestro organismo evitando así la retención de líquidos.
Otro mineral muy presente en los champiñones es el fósforo que beneficia mucho a nivel óseo (fortaleciendo dientes y huesos) y mantiene regulado el sistema nervioso conservando al organismo en armonía, evitando el estrés y estimulando la actividad mental.
Sin embargo el mineral más notable en su composición es el selenio, que resulta un excelente antioxidante que previene la degeneración de las células contra el cáncer. También ayuda en la fertilidad tanto en hombres como en mujeres, evitando los radicales libres en la ovulación de la mujer y aumentando la testosterona y los espermatozoides en el hombre.
El selenio también tiene la cualidad de eliminar los metales pesados que pueden condensarse en nuestro organismo, ideal para fumadores o para todo aquel que viva en ciudades que contengan mucha contaminación. Otro gran aporte de las setas son las vitaminas del grupo B, muy interesante para frenar la caída del cabello mientras favorece su crecimiento.
Cómo consumir los champiñones
Se pueden consumir cocidos, o crudos. Podremos agregarlos en ensaladas y junto a otras verduras, ideal para reemplazar la carne en dietas vegetarianas, y riquísimas en tortillas ya que van súper bien con huevos. Las propiedades y beneficios de los champiñones además aportan mucho sabor a tus comidas.