Muchos piensan que la naranja y el limón son las únicas frutas cítricas que ofrecen beneficios a la salud. Con frecuencia olvidan que el pomelo o la toronja también aportan grandes beneficios al bienestar general de nuestro organismo. Los pomelos de temporada son ricos en vitamina C, que como sabemos, es un poderoso antioxidante y no solo eso, también contiene vitamina A, potasio, tiamina, folato, calcio, hierro, magnesio, fósforo y vitamina B6.
¿Por qué debes incluir más pomelos o toronjas en tu dieta?
Además de ser una fruta baja en calorías, el pomelo o toronja contiene varios fitonutrientes y flavonoides que benefician la salud del cuerpo. A continuación te compartimos algunos de los beneficios del pomelo.
Te ayuda a perder peso
Al ser una fuente rica en vitamina C, agua y fibra, el pomelo es bueno para las personas que están intentando perder peso. Las toronjas tienen la capacidad de mejorar la función metabólica, además que también regulan el metabolismo de la grasa, permitiendo con ello quemarla. Además, su contenido de fibra y agua, permiten reducir el almidón y el azúcar en el cuerpo.
Estabilizan el azúcar en la sangre
La Sociedad Americana de Diabetes recomienda el pomelo a las personas que padecen de diabetes. Se trata de una fruta con un bajo indice glucémico que como consecuencia no ocasiona un incremento en el azúcar en la sangre luego de su consumo. Además, el flavonoide conocido como naringenin, incrementa la sensibilidad del cuerpo a la insulina, manteniendo un peso corporal saludable.
Los pomelos protegen contra el cáncer
El pomelo también contribuye a reducir el riesgo de cáncer de estómago, colon, vejiga, cáncer de mama y cáncer de esófago. Además, gracias a que tienen propiedades antioxidantes, las toronjas pueden combatir los radicales libres, que en este caso son sustancias que ocasionan daño a las células del cuerpo y son las responsables de ocasionar tales enfermedades mortales como el cáncer.
También reducen el riesgo de cálculos renales
Una de las razones por las que se recomienda beber el zumo de pomelo tiene que ver con su capacidad para reducir el riesgo de cálculos renales. Las toronjas contienen una gran cantidad de ácidos cítricos contribuyen a disuadir la formación de piedras o incluso a romper las piedras pequeñas que se están formando. El ácido cítrico del pomelo hace que la orina sea menos propicia para la formación de piedras.
Protege tu corazón
De acuerdo con un estudio del año 2015 publicado en American Journal of Clinical Nutrition, se encontró que las personas que comían frutas y verduras tenían un 15% menos de riesgo de desarrollar una enfermedad cardíaca. Aquellas personas que tenían niveles más altos de vitamina C en su sangre, tenían incluso tasas aun más reducidas de riesgo de enfermedad cardíaca. No solo eso, el alto contenido de potasio en las toronjas funciona como un vasodilatador de tal manera que ayuda a que los vasos sanguíneos y las arterias se relajen. De esta manera se reduce la presión arterial, al tiempo que disminuye el riesgo de accidentes cerebrovasculares y ataques cardíacos.
El consumo de pomelo previene la artritis
El ácido salicílico que contiene el pomelo ayuda a que el calcio inorgánico acumulado en los cartílagos de las articulaciones, se descomponga correctamente en nuestro cuerpo y lo podamos eliminar de forma natural.
Tomando zumo de pomelo o toronja podemos prevenir la aparición de la artritis, pero si ya padecemos de esta dolencia, se debe de tomar de forma habitual zumo de pomelo con vinagre de sidra de manzana, ya que con ello podemos lograr una significativa mejora.
Otros beneficios del pomelo
- Reduce la fiebre en los resfriados
- Disuelve los cálculos biliares
- Impulsa la función del hígado
- Mejora el sistema inmunológico
- Mejora el tránsito intestinal
- Ayuda a mantener la piel sana