La bulimia nerviosa es un trastorno alimenticio que se caracteriza por los atracones y la purga de alimentos. Con frecuencia las personas que padecen de esta condición son llamados “bulímicos” y solo en los Estados Unidos se calcula que 1.5% de las mujeres y el 0.5% de los hombres, padecerán bulimia nerviosa en algún momento de su vida.
Síntomas de la bulimia nerviosa
De forma recurrente, tanto los atracones como las purgas son síntomas asociados a la bulimia nerviosa. De hecho, se considera como bulimia cuando en promedio al menos una vez a la semana durante tres meses se realizan estos comportamientos.
Los atracones de comida
Consiste en comer alimentos al punto de sentirse incómodamente llenos. La persona puede sentir que esta fuera de control o sentir vergüenza, por lo que intenta ocultar los atracones.
Conducta compensatoria inapropiada
En este caso se trata de comportamientos que están destinados a prevenir el incremento de peso de los atracones. Estos comportamientos con frecuencia incluyen vómitos, ayuno, mal uso de laxantes o diuréticos, ejercicio en exceso o incluso el uso de enemas para controlar el peso.
Preocupación excesiva por el peso o forma
Estas preocupaciones son un problema cuando el peso de la persona o la forma de su cuerpo tienen un impacto sobre si o no se sienten bien consigo mismo.
Causas y factores de riesgo de la bulimia nerviosa
A pesar de que no existe una causa para la bulimia, si hay factores de riesgo conocidos para padecer esta enfermedad, incluyendo:
- Ser mujer. Las mujeres son aproximadamente tres veces más propensas a padecer bulimia nerviosa en comparación con los hombres.
- Dietas frecuentes. Las mujeres que hacen dietas frecuentes son hasta 12 veces más propensas a experimentar atracones en comparación con las mujeres que no lo hacen.
- Enfermedades mentales. Como la ansiedad, los trastornos depresivos, trastornos de la personalidad y el trastorno por abuso de alcohol.
- Cambios de vida. Acontecimientos estresantes traumáticos u otros factores de estrés como un nuevo trabajo, pueden desencadenar la bulimia nerviosa.
Tratamiento para la bulimia nerviosa
El tratamiento para la bulimia nerviosa con frecuencia puede llevarse a cabo en un entorno no hospitalario, en función de los problemas de peso, los síntomas y el estado de salud general de quien la padece. En caso de que se requiera de ayuda las 24 horas para superar el problema de la bulimia, existen programas de residencia que están disponibles y que ofrecen buenos resultados.
Tal como sucede con otros trastornos de alimentación, la bulimia es tratada de mejor forma por un equipo de médicos especializados en nutrición y salud mental. En cualquier caso, el tratamiento para la bulimia nerviosa tiene como objetivo abordar problemas subyacentes que están derivando en estos comportamientos, además de la imagen corporal y la relación con la alimentación.
En algunos casos el uso de los medicamentos antidepresivos se ha encontrado que pueden ayudar para tratar la bulimia nerviosa en adultos. No se recomienda sin embargo, su uso en niños o adolescentes.