Lo que nadie te dice de la menopausia

Todos los síntomas más destacados y frecuentes en las mujeres que se encuentran en el periodo de la menopausia.


Síntomas de la menopausia

La menopausia es una condición normal que experimentan todas las mujeres a medida que envejecen, y con ellas su organismo. El término «menopausia» se puede describir como cualquiera de los cambios que una mujer pasa justo antes o después de que ella deja de menstruar y que, por lo tanto, marca el final de su período reproductivo.

Existen muchos cambios bruscos en el organismo y en el cuerpo de las mujeres mientras pasan por esta etapa, sobre todo cuando están pre-menopáusicas, ya que se enfrentan a situaciones conocidas porque la sociedad las ha preparado con el “boca a boca” y otras, sin embargo, que son desconocidas para la mayoría.

¿Qué nos pasa cuando nos llega la menopausia?

Aumento de peso

El aumento de peso es algo muy común en las mujeres que tienen la menopausia, siendo por lo general un aumento gradual, acumulándose más grasa en la zona abdominal.

Para evitar dentro de lo posible esta condición, es aconsejable llevar una alimentación acorde a nuestra edad y complexión, completando con un poco de ejercicio diario.

El “colesterol malo” tiende a subir

Resulta que el estrógeno hace mucho más que ayudar a regular los períodos: Mantiene el colesterol LDL (el tipo malo) y HDL colesterol bajo (el bueno) de altura. Por lo tanto, como el estrógeno disminuye durante la menopausia, el LDL tiende a subir y el HDL sigue siendo el mismo.

La buena noticia, es que si llevas un estilo de vida saludable, a medida que se acerca la menopausia puede evitar estas fluctuaciones.

Se debilitan los huesos

Los estrógenos son las hormonas que producen los ovarios de las mujeres y en el periodo de la menopausia éstos dejan de producirlos, siendo este el principal motivo por el que los huesos comienzan a debilitarse.

Por esta razón, se recomienda el consumo de productos ricos en vitamina D y calcio a todas las mujeres con la menopausia.

La vida social disminuye porque te sientes menos social

Si has sido siempre una persona extrovertida, es posible que te sorprenda cuando de repente sientes como que pasas más tiempo a solas. La menopausia es un período de introspección, lo que significa que puedes experimentar un cambio emocional que podría afectar tu vida social.

No te limites a saltar a la suposición de que estás deprimida, simplemente has llegado a ese momento en la vida de una mujer cuando empiezas a ponerte en primer lugar siempre, sobre todo si antes no lo hacías.

Cambios de humor importantes

Los cambios de humor suelen ser muy habituales en las mujeres con menopausia, ya que se producen grandes alteraciones de elementos químicos del cerebro.

Es normal sentir ciertos estados al mismo tiempo, como por ejemplo, ansiedad, coraje, agotamiento, tristeza y vulnerabilidad.

Es el momento de actualizar tu crema hidratante

A medida que los niveles de estrógeno disminuyen, también lo hace la producción de grasa en tu piel, causando sequedad excesiva que puede conducir a una tez escamosa. La solución: utilizar una crema hidratante o incluso un aceite facial.

Esta ausencia de grasa hará que, en aquellas personas propensas al acné, volverán a ser visitadas por él aunque no de una manera masiva, por lo que es bueno utilizar productos con aceite para la cara. Y sobre todo, no podemos perder de vista el agua, será nuestra mejor aliada para mantener nuestra piel y nuestro organismo totalmente hidratado.

Sofocos y sudoración

El 90% de las mujeres que se encuentran en periodos de pre-menopausia o menopausia padece grandes sofocos acompañados de sudor, esto es debido a que la temperatura corporal aumenta y desciende repentinamente.

Aumentará la pasión por una buena siesta

Incluso si se ha dormido como una campeona, la menopausia puede hacer que abrir y cerrar los ojos a lo largo del día sea un gasto de energía alto para el organismo, afectando a los niveles de energía, sus emociones, su peso, e incluso su libido.

Por lo que, por lo general, se recomienda hacer una siesta diaria de 20 minutos, en los que consigamos reiniciar nuestro cuerpo y, con él, nuestras energías para terminar el día y poder llegar a la noche sin necesidad de ayudas extras como la cafeína, a la vez que se convierte en una manera más que eficaz para controlar el resto de síntomas que la menopausia pueda estar provocando en nuestro cuerpo.


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