Ha llegado la primavera y a pesar de ser una de las épocas del año más hermosas, también es la época en la que el polen de las flores que está en el aire puede causar serias molestias en tu aparto respiratorio. Bien sea por alergias o por resfriados e incluso, por los altos niveles de contaminación que existen en las diferentes ciudades, la tos puede llegar a ser una gran molestia.
Si eres de las personas que prefiere los remedios naturales y no te gustan en lo absoluto los jarabes para la tos o el consumo excesivo de medicamentos, hoy te traemos unos cuantos remedios que te ayudarán a eliminar la tos naturalmente.
Remedios caseros para la tos
Miel, limón y aceite de oliva
Esta sencilla receta hará maravillas por tu garganta y con tu tos. Funciona como un jarabe natural: es expectorante, mucolítico y calmará las irritaciones de la garganta.
Lo único que tienes que hacer para eliminar la tos naturalmente es tomar el jugo de un limón, agregarle una cucharada de miel natural y una cucharada de aceite de oliva extravirgen. Mezcla un poco para que los ingredientes se integren y listo. Lo puedes tomar a la hora que desees, durante varios días y puedes guardarlo en el refrigerador.
Pimienta picante
Esta mezcla te ayudará a eliminar la molesta flema: toma dos cucharadas de jugo de limón y una de miel, agrégale una cucharadita de pimienta picante molida y listo. Te ayudará a expulsar esas molestas mucosidades.
Jarabe de rábano
Esta sencilla receta es una de las mejores maneras de eliminar la tos naturalmente.
Toma diez rábanos, los licúas con una taza de jugo de limón y ½ taza de agua, una vez colada esta mezcla, agrega una cucharada de miel y hierve el líquido a fuego lento por media hora. Toma una cucharada cada cuatro horas.
Cebolla morada, jengibre y miel
Este potente jarabe es una maravilla para eliminar la tos naturalmente.
Toma una cebolla morada, una cucharada de jengibre y una cucharada grande de miel natural. Licúa todo esto con ½ taza de agua y reserva en un frasco de vidrio.
Debes tomar una cucharada de este jarabe cada cuatro horas. Si el sabor te resulta muy fuerte, puedes diluir una cucharada en una taza de agua caliente, para tomarlo en forma de té.
No olvides consumir muchos líquidos y abrigarte. ¡Cuídate!