Todos los seres vivos, incluso algunos inanimados, tienen energía. Desde el punto de vista de la ciencia, la materia no es otra cosa que energía muy comprimida, y eso explica por qué el universo pudo salir de un minúsculo punto, tal como describe el Big Bang. Una planta contiene muchísima energía.
También hay energías que no se pueden medir ni explicar. Por ejemplo, muchas personas colocan en la parte trasera de la puerta de su hogar una planta de sábila (aloe), con la que alejan las malas energías de su hogar. La planta no muere a pesar de que nunca se riega.
Otro ejemplo es la planta llamada “planta de la moneda”, que suele estar en los hogares, representando la fe de que a sus habitantes nunca les faltará lo esencial para vivir e intentando atraer la abundancia a ese lugar.
Una planta que llegó desde África para quedarse
La planta de la moneda tiene como nombre científico el de Crassula ovata, que hace referencia a sus hojas gruesas y ovaladas. También se le conoce como “planta del dinero” o “mata de jade”, debido a su color.
Es originaria del sur de África y en Europa se le atribuyen propiedades tales como la de atraer la abundancia y el bienestar de quienes la cuidan esmeradamente. Debido a ese conocimiento popular, en la actualidad es una especie que puede encontrarse en todo el mundo.
Sus hojas, que crecen en pares, son suculentas. Son gruesas y carnosas, y presentan el característico color que le valió el nombre de jade. Las ramas, gruesas y firmes, también son verdes, aunque en las partes más antiguas adquieren la apariencia leñosa de los arbustos.
Las flores del jade son muy hermosas, de color rosa o blanco, según la variedad. Debido a ello, también se usan frecuentemente como planta decorativa.
¿Por qué se considera un amuleto de la suerte?
La planta de jade cuenta con una característica que puede estar asociada a la idea de que atrae la suerte, y es que se puede reproducir por medio de sus hojas caídas. Cuando sus hojas caen en terreno fértil, de los bordes surge una nueva planta de jade que se expande por el terreno. Esta característica genera una sensación de abundancia y prosperidad.
Según cuenta la leyenda, un granjero muy pobre se llevó una de estas plantas a casa por lo hermosa que le pareció. Admirado por la creación divina, elevaba sus oraciones y solicitaba prosperidad. Cuando logró la fortuna que antes se le había negado, atribuyó el milagro al hallazgo de la planta. De allí el nombre de “planta del dinero”. Tal leyenda motivó que las personas se regalaran entre sí estas plantas como acto de buenos deseos.
Hoy se sigue regalando a los buenos amigos con el mismo deseo de que prospere su economía, y estos deben cuidarla para que nunca falte nada en su hogar. La planta de las monedas es mucho más que una planta: es un vehículo para la buena energía.
Cultivo y cuidados de la planta del dinero
Cómo cultivar esta planta
Si optas por cultivar tu propia planta, lo primero que tienes que hacer es obtener un esqueje, intentando cortar por alguna zona de tallo grueso y que contenga un puñado de hojas gruesas y completamente sanas.
Deja el esqueje en un lugar seco durante 3 o 4 días hasta que el corte del tallo haya cicatrizado. Ahora ya lo puedes plantar en una maceta mediana, preparando una mezcla del 70% de tierra y el 30% de abono. Recuerda que el tallo debe de estar lo más profundo posible.
Cómo cuidar la planta del dinero
Coloca la maceta en algún lugar con mucha luz, pero evitando los rallos del sol, ya que las hojas podrían quemarse. Evita regar la planta durante dos o tres semanas hasta que veas que salen nuevos esquejes, ya que de lo contrario, se podría llegar a podrir el tallo y no llegarían a salir las raíces.
Para el cuidado habitual de la planta del dinero, solo tendremos que regarla con agua cuando notemos que las hojas comienzan a secarse o cuando la tierra esté completamente seca. Tenemos que tener en cuenta que este tipo de plantas necesitan agua pero no en exceso.
Transcurridos unos meses, si observas que la planta ha crecido lo suficiente, puedes plantearte trasplantarla a una maceta más grande. Cuanto mayor sea el volumen de la planta, más energía positiva atraerá hacia tu hogar.