Para mantener una buena salud es muy importante seguir unas prácticas básicas de higiene personal. Esto evitará en cierta medida la aparición de algunas enfermedades e infecciones. Así que si no quieres descuidar tu higiene, sigue los consejos que a continuación mencionamos.
Prácticas básicas de higiene
Lavado de manos
Una de las mejores maneras de mantenerse con buena salud es mantener las manos limpias. También debemos animar a nuestros amigos y familiares a mantener sus manos limpias. Vamos a tomar algún tiempo para aprender más acerca de cuándo y cómo lavarse las manos.
Cuando lavarse las manos
Lávate las manos con jabón y agua:
- Antes, durante y después de la cocción de alimentos
- Antes de comer
- Después de ir al baño
- Después de cambiar pañales o ayudar a un niño a usar el baño
- Después de sonarse la nariz, toser o estornudar
- Después de tocar a tu mascota o limpiar los desechos de tu mascota
- Después de tocar la basura
- Antes y después de tratar un corte o una herida
Mantener tu boca sana
Hay una serie de cosas que puedes hacer para mantener tu boca sana:
- Cepillarte los dientes y limpiar tu dentadura postiza cuando te despiertas, antes de ir a la cama, y después de cada comida.
- Usar un cepillo de dientes suave.
- Obtener un nuevo cepillo de dientes cada 3 meses.
- Utilizar el enjuague bucal que recomienda tu médico o enfermera para evitar lesiones en la boca.
- Si llegas a desarrollar úlceras en la boca, debes hablar con tu médico acerca de si se debe sustituir el enjuague bucal.
- Si estás recibiendo o has recibido recientemente quimioterapia, consulta con tu médico o enfermera antes de usar el hilo dental pues puede aumentar las probabilidades del sangrado dental.
- Evita el uso de palillos de dientes.
- Trata de mantenerte alejado de las cosas que pueden irritar la boca: alcohol, tabaco, comida picante, ajo, cebolla, vinagre, alimentos crujientes y bebidas ácidas (por ejemplo, naranja y zumo de pomelo).
Más consejos para mantener su boca sana
Aquí hay algunas cosas adicionales que puedes hacer para mantener tu boca sana:
- Mantén los labios húmedos mediante el uso de bálsamo para los labios.
- Trata de beber al menos ocho vasos de agua al día.
- Comprueba tu boca todos los días en busca de enrojecimiento, hinchazón, llagas, manchas blancas, o sangrado, y visita a tu médico si cualquiera de estos síntomas están presentes.
- Cuando visites a un especialista, que sea siempre de confianza. Existen muchos estafadores que causan estragos en la salud dental de los pacientes.
Cuidado de la piel
Siguiendo estos consejos vas a proteger tu piel:
- Bañarte todos los días y utilizar el agua caliente es una medida principal.
- Evita dentro de la medida de lo posible acudir a spas o jacuzzis.
- Usa un jabón suave para el baño.
- Usa una toalla suave para secar suavemente la piel y evitar posibles irritaciones.
- Asegúrate de limpiar concienzudamente los pies, la ingle, axilas y otras zonas sudorosas del cuerpo.
- No compartas toalla de baño con otros miembros de la familia.
- Usa loción sin perfume o crema hidratante en la piel después de que te hayas secado por completo.
Evitar las infecciones en la piel
Si sigues algunos pasos simples podrás protegerte de lesiones e infecciones:
- Usa una máquina de afeitar eléctrica y no de cuchilla.
- Ten cuidado al manipular objetos filosos.
- Usa guantes cuando hagas trabajos de jardinería para proteger tus manos de cortes y raspaduras.
- Ten cuidado al hacer ejercicio, debes hacerlo en un lugar amplio y seguro para evitar golpes y raspaduras.
- Ten cuidado al caminar sobre superficies húmedas o resbaladizas para no caer y provocar heridas en la piel.
- Pon especial cuidado cuando te hagas la manicura y pedicura.
- No aprietes ni rasques las espinillas. Para quitarlas hay diversos remedios caseros muy eficaces.
- Usa ropa que sea apropiada para el tipo de actividad que vas a hacer.
Cuando acudir al médico por el estado de una herida
Cada vez que cambies un vendaje debes comprobar si hay signos de infección. Llamar al médico o enfermera, si notas cualquiera de los siguientes:
- Drenaje excesivo, sobre todo si es de color amarillo
- Mal olor procedente de la herida
- Enrojecimiento en la piel alrededor de la herida
- La inflamación de la piel alrededor de la herida
- Dolor o sensibilidad