Remedios caseros para limpiar ollas quemadas

En esta ocasión te muestro unos trucos muy sencillos y eficaces para limpiar las ollas quemadas fácilmente y apenas sin esfuerzo.


Cómo limpiar ollas quemadas

No sé a vosotros pero a mi últimamente me pasa mucho y es que me distraigo fácilmente mientras cocino, y he tenido que poner en práctica algunos remedios caseros para limpiar ollas quemadas, ya que hay dos de mis favoritas que estuvieron sufriendo quemaduras de comida por largo tiempo que provocaron grandes manchas negras en el fondo y que con lavarlo no fue suficiente.

Al principio pensaba que no iba a poder recuperar el recipiente y que si lo volvía a utilizar en esas condiciones, el olor y sabor a quemado se impregnarían en la comida que voy a cocinar. Por suerte no sólo es fácil de limpiar sino que los elementos a utilizar seguramente los tenemos, o al menos uno, ahora mismo en nuestra cocina.

Cómo limpiar ollas quemadas

A continuación te contaré como hacer la limpieza con remedios caseros para limpiar ollas quemadas, eso sí ahora debemos estar atentos porque si no en vez de dejar nuestra olla como nueva la pondremos peor. Tampoco nos tomará mucho tiempo y podremos recuperar cualquier tipo de olla, de barro, de aluminio o loza, y dejarla como nueva.

Aunque sepamos que una parte de lo quemado no lo podremos quitar, igualmente debemos lavar la olla para saber el estado real de la zona quemada.

Los Remedios caseros para limpiar ollas quemadas

Sal

Debemos cubrir con agua todo lo que muestre costra negra y agregar dos cucharadas de sal, si es mucha superficie a cubrir entonces agregar un poco más.

Si lo quemado se ve fácil de quitar entonces solo debemos dejarlo en remojo 15 minutos y luego volver a lavar de manera normal; si de lo contrario se ve muy pegado lo llevaremos al fuego o al calor de tu vitrocerámica y lo dejaremos hervir unos minutos. Una vez que enfría lo lavamos.

Limón y bicarbonato de sodio

Esta combinación sirve para muchas cosas y también como remedio casero para limpiar ollas quemadas.

Poniendo agua con bicarbonato y un limón o su zumo en remojo por 1 hora; o frotando medio limón sobre la zona a recuperar y alternándolo con la bayeta o esponja con bicarbonato, en cuestión de minutos lo iremos dejando brillante y como nuevo.

Detergente o vinagre blanco

Será un proceso similar, pondremos agua caliente en el cazo a recuperar, la cantidad suficiente que cubra la zona quemada y le agregaremos el detergente que uses para tu vajilla o un buen chorro de vinagre blanco.

Lo llevaremos a un suave hervor al mínimo por 15 minutos. La dejamos enfriar y volvemos a frotar sobre lo negro. Si vas a utilizar detergente te recomiendo tapar la olla durante el hervor porque hará espuma.

Lejía como último recurso y con precaución

Sabemos que es un producto tóxico y corrosivo, solo recurrir a este truco si lo quemado en tu olla está demasiado incrustado.

Es el mismo proceso de poner un buen chorro de lejía a hervir con agua durante 5 minutos, pero es fundamental contar con guantes y evitar respirar la nocividad durante el hervor.


¿TE GUSTA? ¡COMPARTELO CON TUS AMIGOS!

Comentarios

comentarios