Ingredientes
1 litro de leche,
1 pechuga de pollo,
1 trozo de jamón serrano de125 gr.,
½ vaso (de los de vino) de aceite de oliva virgen,
casi el doble de cantidad de harina,
una pizca de nuez moscada,
sal,
Aceite para freír,
huevo
pan rallado
Preparación:
Ponemos la leche en una cazuela al fuego, e introducimos en ella la pechuga perfectamente limpia de piel, huesos y grasa. Una vez cocida, la retiramos escurrida y la dejamos enfriar. Cuando esté fría la cortamos en trocitos pequeños y reservamos.
Por otro lado, limpiamos el jamón de grasa y corteza y lo picamos muy pequeño, reservamos.
En una sartén o cazuela que no se pegue, ponemos el aceite de oliva y la harina, y, con ayuda de unas varillas, movemos y dejamos cocer al fuego unos minutos. Apartamos y dejamos enfriar. Ponemos de nuevo al fuego y, poco a poco, vamos añadiendo la leche de haber cocido el pollo, sin dejar de desliar con las varillas. Así hasta terminar con la leche.
Ponemos a punto de sal y nuez moscada, añadimos el pollo y el jamón picados y mantenemos al fuego, sin dejar de mover 10m minutos más. Apartamos y volvemos a dejar enfriar.
Con ayuda de una cuchara cogemos porciones de farsa y las enharinamos dándoles forma, mojamos con huevo y, por último, embadurnamos con pan rallado. Así con toda la masa, procurando darles a todas ellas similar tamaño.
Las freímos en abundante aceite de oliva caliente, hasta que queden doraditas. Sacamos a papel absorbente y a comer.