Cortamos el solomillo de pavo en trozos y los colocamos en un bol. Vamos introduciendo el vino, la soja, la cebolla fresca y los ajos cortados en trocitos, y salpimentamos. Dejamos en el frigorífico dos horas como mínimo.
Una vez transcurrido el tiempo pinchamos la carne y la verdura en los palitos de brochetas, y lo vamos colocando en una bandeja para horno. Para que os hagáis una idea salen unas 4 o 5 brochetas, según cortéis los trozos. Echamos por encima un poco el adobo, la cebolla y los ajos donde hemos tenido la carne, y le añadimos un buen chorreón de aceite. Las metemos en el horno precalentado a 200º unos 30 minutos.
Emplatamos poniendo las brochetas y acompañamos con una ensalada.